Streptococcus pneumoniae (S. pneumoniae) es uno de los principales microorganismos implicados en las infecciones respiratorias adquiridas en la comunidad, entre ellas la neumonía, que puede ir acompañada de bacteriemia neumocócica1. Determinados grupos poblacionales, sobre todo ancianos e individuos con enfermedades debilitantes subyacentes, padecen con mayor incidencia infecciones neumocócicas bacteriémicas, formas invasivas graves, que se asocian con una elevada mortalidad2. La introducción de la vacunación antineumocócica en los programas de inmunización europeos y la presión selectiva de los antibióticos sobre las cepas circulantes, han producido cambios en la incidencia y en la epidemiología de la enfermedad3. En los últimos años se ha observado una reemergencia de cepas de S. pneumoniae resistentes a penicilina y a otros agentes antimicrobianos, lo que dificulta el tratamiento y por consiguiente complica el pronóstico de estas infecciones. La principal limitación de la vacuna polisacarídica 23-valente (VNPS-23) es no haber demostrado un efecto significativo sobre el riesgo de desarrollar neumonía neumocócica bacteriémica (NNB)4. El impacto de la vacuna conjugada 13-valente (VNC-13) sobre la bacteriemia y otras formas invasivas de enfermedad neumocócica en adultos se encuentra todavía en evaluación4. En el presente trabajo se describen las características epidemiológicas y los factores relacionados con la mortalidad en los pacientes diagnosticados de NNB, así como el perfil de resistencia antimicrobiano y la distribución de serotipos de las cepas aisladas. Se seleccionaron todos los pacientes mayores de 14 años diagnosticados de neumonía y con hemocultivo positivo para S. pneumoniae, durante el periodo 2011-2016. Se incluyeron 159 episodios de NNB en 159 pacientes. La distribución por sexos mostró 100 (62,9%) varones y 59 (37,1%) mujeres. La mediana de edad fue 75 (RIC: 59-85) años. El 73% mostraron una CMI≤0,06 a penicilina y el 94% una CMI≤1 a cefotaxima. Respecto a otros antimicrobianos se registró un 8% de resistencia a levofloxacino, un 27% a eritromicina y un 20% a clindamicina. El 28% de las cepas resistentes a clindamicina mostraron un patrón de resistencia inducible. El serotipo se determinó en 158 cepas, y se encontraron hasta 33 serotipos diferentes. Los más frecuentes fueron el 3 (16%), 19A (11%), 14 (8%), 22F (7%), 19F (5%), 6C (4%) y 12F (4%). El grupo de cepas con serotipo 19A destacó al mostrar un alto porcentaje de resistencia a cada uno de los antibióticos estudiados, constituyendo el 67% de las cepas con CMI>2 para penicilina, el 70% de las cepas con CMI>1 para cefotaxima, además del 33, 28 y 31% de las cepas resistentes a eritromicina, clindamicina y levofloxacino, respectivamente. La incidencia media de la NNB fue de 7,8 casos por 100.000 habitantes/año (rango: 3,9-10,6) (fig. 1). El 72% de los pacientes presentaron alguna enfermedad subyacente como diabetes, cardiopatía, neoplasia, afección respiratoria, inmunodepresión y otras. La mortalidad global intrahospitalaria fue del 23%. Los factores de riesgo que se asociaron de forma significativa con la mortalidad fueron la edad ≥65 años (OR: 3,13; IC 95%: 1,21-8,07; p=0,02), la cardiopatía (OR: 2,61; IC 95%: 1,09-6,25; p=0,03) y la enfermedad neoplásica (OR: 3,13; IC 95%: 1,35-7,25; p=0,01). A pesar del envejecimiento de la población y del aumento de la esperanza de vida en los pacientes con enfermedades debilitantes, no observamos una variación importante en la incidencia de NNB entre el comienzo y el final del período de estudio. El número de cepas en las que se detectó resistencia a penicilina (27%) es similar a lo publicado en la bibliografía5. En nuestra población desconocemos la tasa de vacunación mediante PCV-13 y PPV-23, no obstante, la vacunación mediante PPV-23 en la población adulta (>60 años) en España oscila entre el 52,5 y el 66%6,7. A pesar de ello, el serotipo 19A, incluido en las vacunas VNPS-23 y VNC-13, fue el segundo en frecuencia y el que se asoció más frecuentemente a multirresistencia. En nuestra serie, no encontramos ninguna asociación entre la mortalidad y los diferentes serotipos, debido a un probable error de tipo II. La mortalidad por NNB oscila del 13 al 16%, siendo superior en determinados grupos poblacionales como en ancianos, con porcentajes del 22-51%8. La alta mortalidad encontrada en nuestro estudio (23%) puede deberse a la elevada representación de pacientes ancianos con comorbilidad en nuestra serie.
The Impact Factor measures the average number of citations received in a particular year by papers published in the journal during the two preceding years.
© Clarivate Analytics, Journal Citation Reports 2022
CiteScore Percentile indicates the relative standing of a serial title in its subject field.
See moreSRJ is a prestige metric based on the idea that not all citations are the same. SJR uses a similar algorithm as the Google page rank; it provides a quantitative and qualitative measure of the journal's impact.
See more